Todo va bien. La Casa Blanca salió este martes en tromba a alejar cualquier mal augurio sobre el proceso de paz en Gaza. Eso, a … pesar de la incertidumbre y el temor existente a que Benjamín Netanyahu rompa la baraja y ordene desplegarse de nuevo al ejército en la Franja después del ataque de una célula islamista a una unidad militar este domingo y la resistencia de Hamás a desarmarse. La organización ha pedido alargar el alto el fuego hasta cinco años y este martes se supo que ha intentado introducir a personas afines dentro del grupo de quince tecnócratas que formaran parte del gobierno de transición. Se supone que con esta maniobra la milicia intentaría mantener influencia en la futura Gaza, pese a que el acuerdo de paz establece su apartamiento militar y político completo..
El propio Donald Trump se movilizó para frenar las tensiones, posiblemente molesto porque la creación de una fuerza multilatelar va lenta y una filtración a ‘The New York Times’ reveló las dudas de los países árabes y de otros aliados a enviar tropas a Gaza. Sienten que pueden producirse enfrentamientos armados con Hamás mientras conserve operativos los túneles usados para la guerra de guerillas y no deje las armas.
Los aliados han pedido que se aclare su papel en esta fuerza, sin que todavía haya nada concreto, si bien el Reino Unido dio este martes un paso adelante y envió a un equipo de oficiales de planificación militar a Israel. Eso sí, su misión será unirse al grupo de trabajo formado por 200 efectivos estadounidenses, pero sin entrar en la Franja. Washington parece querer operar allí con una tropa conjunta similar a la que en su día intentó apaciguar Haití y buscaría el respaldo de la ONU.
«Nuestros ahora grandes aliados en Oriente Medio y las áreas circundantes me han informado, con gran entusiasmo, que acogerían la oportunidad, a petición mía, de entrar en Gaza con una fuerza pesada y ‘enderezar a nuestro Hamás’ si Hamás continúa actuando mal, en violación de su acuerdo», enfatizó Trump en un mensaje tranquilizador en cuanto a la colaboración internacional. Pero inquietante en lo demás; «Les he respondido: ¡Todavía no!. Aún hay esperanza de que Hamás haga lo correcto. Si no, el fin será rápido, furioso y brutal».
Un poco de paciencia
Mientras el líder republicano se expresaba así, sus enviados Jared Kushner y Steve Witkoff pedían «un poco de paciencia» en Tel Aviv para que se perciba el proceso de paz en sus primeros avances e hicieron notar que Israel y Hamás están ahora en una negociación cuando «hace dos semanas» la guerra devastaba Gaza.
Condiciones
Israel no dejará que la milicia tenga armas y es cada vez más receloso con los mediadores
El vicepresidente JD Vance también se desplazó al país para cimentar su apoyo. Llegó justo el día en que Hamás entregó los restos de dos nuevos rehenes. Dijo que recuperar todos los cadáveres «llevará tiempo», admitió la posibilidad de nuevos choques «entre personas que han estado luchando durante mucho tiempo», pero se mostró seguro de que «al final la paz va a durar». «Dada la historia del conflicto, creo que todos deberíamos estar orgullosos de nuestra situación actual».
Los mensajes de alerta en Washington han cobrado intensidad después de que el gabinete hebreo le transmitiera que no transigirá en el asunto del desarme ni dará pie a la reconstrucción de Gaza si Hamás conserva alguna parcela de poder o deja un solo cadáver sin entregar. EE UU sospecha que la actitud de la milicia da fuerza al ala dura hebrea para presionar al Gobierno, que también es cada vez más escéptico sobre la mediación catarí, egipcia y turca. «Esta gente nos está llevando a las puertas del infierno», exclamó este martes Amit Halevi, diputado del gobernante partido Likud.
Enlace de origen : Trump afirma que los países árabes atacarían a Hamás si viola la tregua