El presidente del Gobierno ha iniciado su gira por China sacando músculo a cuenta de su tirón en política exterior. Su primera parada en el gigante asiático ha sido en el foro económico de Boao, conocido como el Davos de Asía, donde ante representantes de 50 países de este continente ha hecho una férrea defensa de la paz en Ucrania y de la cooperación económica. Lo ha hecho, según ha presumido, tras haberse reunido en una semana con 40 líderes mundiales. No miente. En los últimos días el presidente del Gobierno ha asistido a un Consejo Europeo en Bruselas y a una Cumbre Iberoamericana en Santo Domingo, así que las cuentas salen.
Durante su intervención en el foro, Sánchez ha reclamado una respuesta global ante los retos que afronta «la humanidad». Entre estos, ha enumerado el cambio climático, la pandemia y, sobre todo, «la brutal e ilegal agresión de Rusia contra Ucrania que está causando una enorme crisis humanitaria de alimentos y seguridad, inflación y un aumento de la deuda en un gran número de países vulnerables». En este último punto, el presidente del Gobierno ha alabado los esfuerzos de Pekín para mediar entre Moscú y Kiev, aunque el plan de paz presentado por las autoridades chinas se considere por la OTAN como una cesión a Vladímir Putin.
El jefe del Ejecutivo ha hecho también un llamamiento contra el proteccionismo y ha instado a China a abrirse a las inversiones y productos de la Unión Europea. «Nadie quiere una fragmentación de la economía o la guerra», ha rematado antes de reunirse con la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.
Reunión con Xi Jinping
El colofón a esta apretada agenda internacional llegará este viernes con un encuentro con Xi Jinping. El presidente chino invitó expresamente a Sánchez a mantener una reunión en la que el plan de paz para Ucrania que impulsa Pekín estará sobre la mesa. El jefe del Ejecutivo, que ejercerá la presidencia rotatoria de la UE a partir de junio y hasta final de diciembre, es el primero de los líderes occidentales que visitará la capital china en las próximas semanas, y entre los que están incluidos Ursula von der Leyen, Emmanuel Macron, Olaf Scholz o Giorgia Meloni.
Lejos de tomarse un respiro en su agenda internacional, Sánchez realizará la próxima semana una nueva gira por países de la UE a modo preparatorio de su presidencia comunitaria. Entre el 4 y 5 de abril viajará a Chipre, Malta e Italia. Desde febrero ha visitado además Austria, Croacia, Eslovenia, Dinamarca, Irlanda y Finlandia.
La directora del FMI, Kristalina Georgieva, interviene en Boao.
Reuters
Una primera jornada en el gigante asiático con intenso contenido económico
La visita del presidente del Gobierno a China tiene un importante contenido económico, como se ha comprobado en el foro económico de Boao, en el que Sánchez ha abogado por poner coto a proteccionismo del Gobierno del gigante asiático y ha solicitado la apertura a las inversiones europeas y nacionales. Según los informes del Ministerio de Asuntos Exteriores, y como ocurre con casi todos los países europeos, el comercio bilateral entre España y China «se caracteriza por un déficit crónico». Sin embargo, añade Exteriores, este ha ido ha ido mejorando en los últimos años gracias al aumento de las exportaciones españolas. Los últimos datos publicados por el Ministerio señalan que en el 2020, las exportaciones sumaron 8.169 millones de euros (por los 6.800 millones en 2019, lo que supone un crecimiento de en torno a un 20%). Las importaciones alcanzaron los 29.333 millones de euros (por 29.143 millones en 2019, lo que supone un crecimiento de en torno a un 0,6%).
Enlace de origen : Sánchez presume en China de tirón internacional: «Me he visto con 40 líderes en una semana»