La posible compra de Vodafone España por parte de Telefónica es solo una «especulación», según el presidente de la operadora, que este lunes participó en … el Foro Objetivo Actualidad organizado por El Correo. Una operación que llevaría a Telefónica a hacerse con el 46% de la cuota del mercado de las telecomunicaciones en España, pero que Murtra no quiso comentar: «Operamos con gran sigilo y llevamos en secreto cualquier operación, pero estas especulaciones generan incomodidad y distracción, pero no afectan a nuestra estrategia ni capacidad de acción», señaló Murtra durante el foro.
Aun así, sí que ha insistido en que la compañía continuará centrada en los mercados en los que es fuerte -de ahí que hayan dejado el mercado latinoamericano- y que el foco estará en reforzar su papel como proveedor de soluciones tecnológicas seguras y competitivas.
Hace unos días la agencia Bloomberg publicó que Telefónica y MasOrange, las dos mayores operadoras de telecomunicaciones del país, estaban explorando la posible compra de Vodafone España. La compañía, propiedad del fondo británico Zegona desde 2023, es una pieza clave en el sector pese a no estar pasando por su mejor momento financiero. Y uno de los escenarios que se plantean es dividir el negocio de la telefonía usuario y empresarial para evitar problemas de competencia que frustraran la operación, según Bloomberg.
Ya en 2020 Telefónica hizo una operación similar en Brasil. Se unió a dos rivales para adquirir un competidor local y se dividieron los activos para obtener luz verde por parte de los reguladores. Esta operación supondría la consolidación más grande en el mercado de las telecomunicaciones español tras la fusión de Orange y MásMóvil, que salió adelante con el visto bueno de Bruselas tras más de tres años de negociaciones. Esta gran operación ha generado la subida en Bolsa de la operadora, cuyas acciones se han disparado en el parqué londinenses más de un 150% en el último año, con un alza que este lunes alcanzó el 3,5%, llegando en algunos momentos de la sesión a rozar el 5%. Zegona pagó 5.000 millones de euros por Vodafone España e intentará rentabilizar al máximo su inversión.
El presidente de Telefónica ha reiterado en varias ocasiones -sobre todo desde su comparecencia en su primer Mobile World Congress el pasado febrero en Barcelona- la necesidad de consolidar el sector de las telecomunicaciones en Europa. Y Murtra quiere que Telefónica juegue un papel activo en esta consolidación. La operadora ha iniciado una revisión integral desde su llegada a la presidencia el pasado 18 de enero que dará lugar a un plan estratégico que se presentará en el segundo semestre.
Titanes tecnológicos europeos
En este sentido y en contra del creciente pesimismo sobre el papel de la Unión Europea en la encarnizada batalla por la hegemonía tecnológica entre China y Estados Unidos, el presidente de Telefónica defendió en su conferencia en Bilbao que el continente aún está a tiempo de reaccionar. «Europa no es una institución decadente», aseguró, al tiempo que reconoció que la brecha con respecto a los gigantes estadounidenses es cada vez mayor. Para cerrar esa distancia, sostiene, será imprescindible contar con «titanes tecnológicos» propios capaces de competir en innovación e influencia global.
El presidente de Telefónica advirtió además de que la autonomía estratégica de Europa es hoy «extraordinariamente frágil» debido a la ausencia de grandes empresas tecnológicas con capacidades propias. A su juicio, la Unión Europea se ha convertido en una mera consumidora de tecnología ajena -principalmente estadounidense- y corre el riesgo de quedarse fuera de la próxima gran transformación digital si no impulsa con decisión la creación de actores industriales de escala global.
«Encantado» con STC
Murtra defendió la necesidad de reducir y simplificar la legislación para adaptar el marco normativo al ritmo de la transformación tecnológica. «No se trata de eliminar la regulación, sino de ajustarla», señaló. Según el presidente de Telefónica, un exceso de trabas normativas puede frenar la innovación, desincentivar la inversión y hacer que Europa llegue tarde a la próxima ola digital.
Las acciones de la operadora perdieron un 60% de su valor en la etapa del expresidente José María Álvarez-Pallete y en el tiempo que lleva Murtra al frente se han revalorizado un 20%. Aún así, el bajo precio hace que algunos competidores extranjeros puedan hacerse relativamente fácil con una parte del negocio. Así ocurrió hace año y medio cuando la saudí STC irrumpió en el capital de Telefónica con el 10% de las acciones. Pese a una operación por la que el Gobierno tuvo que intervenir con la SEPI haciéndose con otro 10%, Murtra indicó que está «encantado» con la presencia de STC en el consejo de administración al ser un «socio industrial» y «a largo plazo».
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