
Los vecinos de Varea andan soliviantados (pancartas en el puente incluidas) por lo que consideran un déficit en la atención médica que reciben en … el consultorio del barrio. Varios residentes han interpuesto quejas formales en la Consejería de Salud en las que expresan su «profunda preocupación por la situación actual del consultorio médico del barrio». Relatan que han detectado una «reducción significativa en el servicio de atención sanitaria: en lugar de contar con asistencia médica todos los días laborables, actualmente solo se presta servicio tres días a la semana (lunes, miércoles y viernes)». Al respecto, opina que «la limitación horaria afecta gravemente a la calidad asistencial de los vecinos de Varea, especialmente a las personas mayores, con movilidad reducida o con enfermedades crónicas, que dependen de una atención médica cercana y continuada». «La reducción del servicio no solo genera incertidumbre, sino que también obliga en muchos casos a desplazamientos a otros centros», señala antes de solicitar que «se restablezca cuanto antes el servicio médico completo en el consultorio de Varea».
A las misivas respondió la semana pasada, también por correo, el director de la Zona Básica de Salud Joaquín Elizalde, Fernando Gallo, que pide «disculpas por los perjuicios ocasionados». También precisa que los ajustes asumidos se deben a que los permisos reglamentarios de la facultativa destinada al consultorio de Varea se cubrían antes con personal de refuerzo del centro Joaquín Elizalde, pero dada la escasez de profesionales médicos, un problema compartido por todas las regiones, ahora esas ausencias se soportan entre los demás profesionales del centro de salud. Gallo corrige la reclamación planteada y señala que la doctora tiene jornada completa los cinco días de la semana, pero la atención sanitaria se reduce a tres días solo cuando la profesional falta semanas completas.
Sea como fuere, esa progresiva pérdida de profesionales médicos en activo y la dificultad para encontrar nuevos facultativos está saturando la atención sanitaria. En peores circunstancias está el consultorio de Los Lirios que luce sus instalaciones abiertas, pero no cuenta con médico asignado ni con cupo de pacientes, por lo que los vecinos del barrio siguen obligados a desplazarse al centro de salud Joaquín Elizalde. «El consultorio lleva operativo desde junio pero el personal que trabaja allí se dedica a tareas administrativas», lamentan en Los Lirios.
Con críticas similares se pronuncian en otros dos barrios con consultorio, La Estrella y Yagüe, cuyos residentes remarcan que «cuando está de vacaciones tenemos que compartir el médico con otros consultorios y hay horas que no está». «Algún día nos quedamos sin médico», apuntan desde La Estrella, cuya principal queja estriba en la tardanza en conseguir citas: «Tardan entre 10 y 15 días en dar citas». E igual en Yagüe: «Si pides cita dan para dentro de semana y media». «Un solo médico no da abasto con tantos pacientes», protestan.
De tres días de atención médica disponen también los vecinos de El Cortijo, aunque en este caso no se registran protestas significativas: «Solo hay consulta lunes, miércoles y viernes, pero eso es de siempre».
Petición de «ayuda» a Madrid
«Cuando puntualmente se producen bajas, permisos o vacaciones, la cobertura se realiza con profesionales del centro de salud de referencia, garantizando la continuidad asistencial y la atención a los vecinos», responden desde la Consejería de Salud.
Las críticas de los vecinos se suman a las de los sindicatos, fundamentalmente, por la saturación en Urgencias. «Nos encontramos en un contexto de falta de profesionales sanitarios que hace que no tengamos todas las capacidades precisas» para la óptima atención de los pacientes que acuden a Urgencias del Hospital San Pedro. Así lo admitió ayer el portavoz del Ejecutivo riojano, Alfonso Domínguez. «Por eso, pedimos al Ministerio, al Gobierno de España, que nos ayude a encontrar más profesionales» para poder paliar «este tipo de situaciones.
Enlace de origen : Los vecinos de Varea, Yagüe y La Estrella claman «por una atención médica diaria»