«Están por las nubes», sentencia una compradora mientras compara los precios de los huevos en un supermercado. Finalmente se decanta por una docena de … talla M. «Antes compraba la L, pero hay que mirar la peseta», añade. Su reflexión es la muestra de una realidad que, en las últimas semanas, se ha hecho más patente. Los huevos son cada vez más caros. Respecto a hace un año, el Observatorio de Precios de la Consejería de Agricultura de La Rioja cifra el incremento en un euro para los de tamaño supergrande, de 75 céntimos para los grandes y de 69 para los medianos. En comparación con 2021, la escalada se cifra entre un 70% y un 100%. El Observatorio de Precios de la OCU, de carácter nacional, eleva el aumento a un euro en solo seis meses.
¿Por qué se ha producido este encarecimiento? La razón principal es la gripe aviar, que ha golpeado con fuerza a España (y al resto de Europa) y ha provocado el sacrificio de 2,5 millones de gallinas ponedoras. «En España no había sobrante de huevos, estábamos ya muy justitos y el mercado se ha quedado desabastecido», explica David Preciado, propietario de Avícola Preciado, que cuenta con 20.000 gallinas en Pradejón. «Además, se da la circunstancia de que esto ha sucedido en un momento de transformación del sector, de jaula a suelo, con lo que ya había muchas naves sin gallinas», añade.
El procedimiento para evitar la propagación de la gripe entre los animales es brutal y simple: cuando se detecta un foco, se sacrifican todos los ejemplares de la explotación. Dos millones y medio de gallinas menos son dos millones y medio de huevos diarios menos para el mercado. Y el precio sube. «En las últimas tres semanas hablamos de 50 céntimos por docena», explica Preciado.
La subida se ha notado menos en los camperos. «Hemos subido veinte céntimos la docena», indica Mamen Carrillo, responsable de Huevocón, con 600 gallinas y dieciséis ocas en libertad. Pero la situación también resulta complicada. «Estamos siendo muy precavidos y hemos reforzado la bioseguridad. Las gallinas comen y beben dentro, se han cerrado trampillas y se han puesto rejillas en las ventanas…», abunda. «Han subido todos los huevos, pero en el precio del industrial se ha notado más. Pero todas esas subidas están justificadas», analiza recordando el aumento paulatino e imparable de todos los insumos: piensos, energía… Un incremento que ha llegado desde los mercados hasta las moquetas de los despachos oficiales. El lunes, el propio ministro de Agricultura, Luis Planas, declaraba que hay que «estar muy vigilantes para que nadie aproveche una situación de este carácter para llevar a cabo ningún tipo de acción especulativa».
El momento actual es de «incertidumbre», en palabras de Preciado, que confía que después de noviembre todo vuelva a su cauce. «Es el momento en el que acaban las migraciones y cruzamos los dedos para que la gripe aviar pase sin causar más daños», dice el propietario de Avícola Preciado. «Porque al que le cae la desgracia le arruina. Hasta un año después, entre sacrificio, desinfección, reposición… no te puedes volver a poner en marcha y durante ese tiempo sin producción y sin clientela te quedas fuera», reflexiona Preciado.
Porque actualmente es necesario pedir esas gallinas de reposición con al menos seis meses de antelación. «Con las incubadoras y las granjas reproductoras saturadas, los plazos serán más largos», reflexiona.
Por eso la prevención es importante y se han reforzado los habituales inspecciones, con análisis de sangre de distintos ejemplares para confirmar que La Rioja continúa limpia de esta infección. De momento, hay seis municipios que se encuentran catalogados como zonas de especial vigilancia por parte del Ministerio de Agricultura por su cercanía a humedales o zonas de paso migratorio (Calahorra, Alfaro, Logroño, Hervías, Leiva y Tormantos) y que desde el lunes deben confinar a sus aves.
Menor subida de la carne
Si el huevo ha sido el más damnificado por esta enfermedad, el precio de la carne de pollo no se ha librado de los incrementos, aunque en menor medida. Respecto al pasado año, el kilo apenas ha subido diez céntimos para los consumidores y para los ganaderos, con una media de 3,56 euros por kilo en pollo de consumo para los clientes y 1,54 para los ganaderos, según la estadística agraria regional. Es más, la carne de pollo se ha convertido en un refugio para las economías domésticas menos pudientes, que incluso están sustituyendo la proteína de otras viandas (ternera o cerdo) directamente por huevos, a pesar de la subida imparable de estos durante los últimos meses.
Enlace de origen : Los huevos se encarecen en el último mes y la docena ya cuesta un euro más que hace un año