El Tribunal Supremo de Estados Unidos, de mayoría conservadora, ha vuelto a otorgar este viernes al presidente Donald Trump una importante victoria al limitar la … facultad de jueces federales para bloquear decisiones de su Administración que consideran ilegales. Por seis votos a favor y tres en contra (los de las juezas progresistas), la corte declaró que las suspensiones a nivel nacional emitidas por magistrado de rango inferior «probablemente exceden la autoridad equitativa que el Congreso ha otorgado a los tribunales federales».
El Supremo, por el contrario, no se pronunció sobre si es constitucional o no el decreto de Trump que pretende privar de la ciudadanía a los hijos de inmigrantes que se encuentren en Estados Unidos en situación irregular. En concreto, en su primer día de regreso a la Casa Blanca, el magnate firmó una orden ejecutiva que exige a las agencias federales negarse a reconocer la ciudadanía de los niños nacidos en el país que no tengan al menos un padre que sea estadounidense o residente permanente legal, también llamado titular de una «tarjeta verde».
Jueces federales en los Estados de Maryland, Massachusetts y Washington detuvieron la aplicación de la directiva de Trump al considerarla contraria a las leyes estadounidenses. Sin embargo, tras el pronunciamiento de este viernes del Supremo quedará sin efecto el alcance de estas tres órdenes judiciales a nivel nacional.
Según los demandantes que impugnaron la orden ejecutiva presidencial, incluidos los fiscales generales demócratas de 22 Estados, así como defensores de los derechos de los inmigrantes e inmigrantes embarazadas, esta directiva de la actual Administración estadounidense acarreará que a más de 150.000 recién nacidos se les negaría la ciudadanía anualmente.
El caso ante el Supremo fue inusual ya que el Gobierno lo utilizó para argumentar que los jueces federales carecen de autoridad para emitir órdenes judiciales de alcance nacional o «universales», y pidió a los magistrados que dicten ese fallo y apliquen la directiva del presidente incluso sin sopesar sus méritos legales.
Debate sobre la Decimocuarta Enmienda
Los jueces federales han tomado medidas, incluida la emisión de órdenes a nivel nacional, para impedir el uso agresivo de la acción ejecutiva por parte de Trump para avanzar con su agenda. En este caso, los demandantes argumentaron que la directiva del inquilino de la Casa Blanca contravenía la Decimocuarta Enmienda, ratificada en 1868 tras la Guerra Civil de 1861-1865, que puso fin a la esclavitud en EE UU. La cláusula de ciudadanía de dicha enmienda establece que todas las personas nacidas o naturalizadas en el país, y sujetas a su jurisdicción, son ciudadanas a todos los efectos.
La Administración, por su parte, sostiene que la 14ª Enmienda, que desde hace tiempo se entiende que otorga ciudadanía a prácticamente cualquier persona nacida en Estados Unidos, no se extiende a los inmigrantes que están en el país ilegalmente o incluso a los inmigrantes cuya presencia es legal pero temporal, como los estudiantes universitarios o los que tienen visas de trabajo.
En una encuesta de Reuters/Ipsos realizada entre el 11 y el 12 de junio, el 24% de los encuestados apoyó la eliminación de la ciudadanía por nacimiento y el 52% se opuso. Entre los demócratas, el 5% respaldó su eliminación, frente al 84% se posicionó en contra. Entre los republicanos, el 43% se mostró favorables, frente al 24% que mostró su disconformidad. El resto expresó sus dudas o no respondió a la pregunta.
El Tribunal Supremo, compuesto por nueve magistrados conservadores y tres juezas progresistas, ya ha dado a Trump varias victorias importantes en sus políticas de inmigración desde que regresó al cargo en enero. El lunes, por ejemplo, allanó el camino para que su Administración reanudara las deportaciones de migrantes a países distintos del suyo sin ofrecerles la oportunidad de demostrar los perjuicios que podrían enfrentar. En decisiones separadas, emitidas el 30 y el 19 de mayo, permitió además que el Gobierno pusiera fin al estatus legal temporal que el anterior Ejecutivo había otorgado previamente a cientos de miles de migrantes por razones humanitarias.
El 16 de mayo, sin embargo, el alto tribunal mantuvo en pie su bloqueo a las deportaciones de inmigrantes venezolanos por parte de Trump bajo una ley de 1798 utilizada históricamente solo en tiempos de guerra, criticando a su Administración por intentar expulsarlos sin el debido proceso adecuado.
Enlace de origen : El Supremo de Estados Unidos limita el poder de los jueces federales para bloquear las órdenes de Trump