Ante las acusaciones de inacción, la consejera León ha explicado en el Parlamento que, una vez que la empresa ha entrado en concurso de acreedores, la labor del Ejecutivo es de «acompañamiento»
Dos de las cuatro empresas del grupo CMP Automotive en La Rioja, Sealing y Handling, con más de doscientos trabajadores, parecen tener las horas contadas. Con la amenaza de cierre pendiente, los comités de empresa y la dirección de la firma, que ha entrado en concurso de acreedores, están negociando la mejor manera de resolver una situación que puede suponer un grave golpe para el tejido industrial de la comunidad autónoma.
En el último pleno del curso, la consejera de Economía, Belinda León, tuvo que responder a dos cuestiones planteadas por diputados de IU y del PSOE. Ambos cargaron contra la, a su juicio, inacción del Ejecutivo. «El Gobierno de La Rioja no puede dar por buena esta actuación de una empresa que ha recibido millones de euros en ayudas», ha denunciado Carlos Ollero (Podemos-IU). Ollero también ha cuestionado que esta sea la primera vez que interviene públicamente la consejera cuando ya en mayo se anunció el cierre irreversible de las dos plantas. Una de ellas, la de Handling, tiene la consideración de centro especial de empleo y da trabajo a un centenar de trabajadores con discapacidad.
En su respuesta, la consejera ha replicado que el Gobierno de La Rioja lleva ocupándose de la situación de CMP Automotive desde noviembre, pero que cuando la firma entró en concurso de acreedores la capacidad de maniobra del Ejecutivo se redujo drásticamente. «Cuando se presenta un concurso de acreedores cambia el escenario. El estudio de viabilidad en el que se había trabajado hasta entonces ya no era posible y había que plantear otra nueva dinámica. Hablé personalmente con el vicepresidente de Seat y fui informando a los sindicatos. Nuestra labor ahora es de acompañamiento», apuntó. León ha avanzado que en estos momentos están negociando empresa y trabajadores y confió en que pronto alcanzarían un acuerdo.
Sus palabras han despertado las sospechas del diputado socialista Ricardo Velasco, que supuso que el cierre de ambas plantas era ya considerado irremediable. «Eso nos preocupa porque revela la nula política industrial de este Gobierno y la ineficacia de su consejera», ha criticado. En su répica, la consejera León rechazó esa idea: «Un concurso de acreedores era, según la vieja escuela, era un estigma; ahora es un paraguas para hacer viable una empresa. En ese momento están. El gobierno no puede intervenir, pero sí acompañar», ha enfatizado.
Velasco aludió también a las otras dos plantas que el grupo CMP Automotive tiene en La Rioja, con otros 200 trabajadores en plantilla. León ha apostillado que esas dos factorías «no están afectadas por ahora» y que esta semana mantendrá una reunión con los comités de empresas de ambas. «Nosotros no buscamos la foto. Los gobiernos no estamos para crear ni cerrar empresas, sino para generar entornos para el crecimiento empresarial», ha concluido.
En un encendido debate posterior sobre la política industrial del Gobierno de La Rioja, el exconsejero y diputado socialista José Ángel Lacalzada comparó la situación de CMP Automotive con la de Talleres Lispar que se generó durante la anterior legislatura. Lacalzada ha señalado cómo, cuando se conocieron las primeras noticias sobre sus planes de deslocalización, el Gobierno de Andreu se movilizó y consiguió que no solo que se quedara en La Rioja sino que se trasladara aquí la producción de la planta de Mendavia.
Enlace de origen : El Gobierno confía en que trabajadores y CMP Automotive alcancen pronto un acuerdo