
La aprobación del Real Decreto que autoriza los medicamentos elaborados con cannabis supone un antes y un después para miles de pacientes en España. La … medida, impulsada por el Ministerio de Sanidad, permitirá el uso controlado de estos preparados en casos de dolor crónico, epilepsias severas o esclerosis múltiple, entre otros. Germán Cantabrana, miembro del Círculo Podemos Cannábico y exdiputado del Parlamento de La Rioja por Podemos, padece una enfermedad rara llamada cadasil (arteriopatía cerebral autosómica dominante con infartos subcorticales y leucoencefalopatía), que le provoca migrañas intensas y pérdidas de visión. Desde su experiencia como paciente y activista, analiza el alcance de esta nueva regulación.
– El Consejo de Ministros acaba de aprobar el Real Decreto que autoriza los medicamentos con cannabis. ¿Qué significa este paso para los pacientes que llevan años reclamando una regulación?
– Pese a que hasta hace poco tiempo ha habido ministros de Sanidad negando la existencia de efectos terapéuticos del cannabis, este Real Decreto desmonta esa falacia. Este paso es importantísimo porque también supone sacar del cajón una propuesta que se hizo hace diez años y que estaba completamente olvidada. El colectivo de pacientes solicitó entonces que se regulara el cannabis para poder aliviar el dolor crónico, y han tardado diez años en moverlo. En los últimos cuatro años la propuesta había estado parada, así que nos parece un avance enorme. Es cierto que es insuficiente, porque le faltan muchas cosas, pero lo más difícil es ponerse en marcha. A partir de ahora toca seguir avanzando.
– Usted forma parte del Círculo Podemos Cannábico y utiliza el cannabis terapéutico por motivos médicos. ¿Cómo ha sido su experiencia personal con este tratamiento?
– Cuando era portavoz en el Parlamento ya sufría los síntomas, aunque entonces acababan de diagnosticarme el cadasil, la enfermedad rara que parezco. Llevaba once años con esto y ningún tratamiento me había parado el dolor. He probado decenas de ellos, literalmente. Un día, mientras preparábamos la proposición no de ley sobre el cannabis terapéutico, me dio una crisis de migraña. Perdí la vista y caí al suelo. Uno de los médicos que estaba allí me atendió y me preguntó si había probado el cannabis. Le dije que no, y me dio unas gotas de aceite. En cuestión de minutos el dolor se redujo lo suficiente como para volver a ser persona, cuando normalmente duraba tres o cuatro días. Desde entonces empecé a informarme y a colaborar con el Círculo Cannábico. Ahora sigo teniendo crisis, pero no me duran cuatro días. Ya no estoy tirado en la cama todo el tiempo.
– Hasta ahora muchos pacientes se veían obligados a recurrir al autocultivo o al mercado negro. ¿Cree que esta norma logrará acabar con esa situación o quedan vacíos legales?
– Quedan muchos vacíos. Esta ley tiene muchas limitaciones, pero al menos la piedra ha empezado a rodar. No es una regulación real, sino un permiso para preparados estandarizados, lo que deja fuera al 90% de los enfermos, sobre todo a quienes tenemos enfermedades raras.
– El decreto fija límites de THC y CBD y un control estricto de la Agencia del Medicamento. ¿Le parece equilibrado o demasiado restrictivo?
– Es restrictivo y no de forma inteligente. Hay enfermedades que requieren dosis más altas de THC, sobre todo con el uso prolongado. Además, que solo se dispense en farmacia hospitalaria tras pasar por unidades del dolor, donde las listas de espera pueden ser de años, hará que mucha gente vuelva al mercado negro.
Regulación
«Este Real Decreto reconoce los beneficios terapéuticos del cannabis»
Prejuicios
«El estigma caerá cuando la gente lo pruebe y vea los resultados que tiene»
Salud
«Desde que uso este tipo de productos mi calidad de vida ha mejorado de forma radical»
– ¿Qué falta para romper el estigma social del cannabis?
– Simplemente, empezar a trabajar. Yo no conocía nada del cannabis antes, no lo fumo ni lo he fumado nunca; no sé hacerlo. Lo que me convenció fue verlo funcionar. Cuando la gente lo pruebe y vea resultados, el estigma caerá. Me ha pasado con algunos amigos que les he dado unas gotas de aceite y al día siguiente me han pedido dónde comprarlo.
– ¿Qué mensaje enviaría a quienes aún desconfían del cannabis medicinal?
– Que lo prueben. Lo peor que puede pasar es que no les haga efecto, pero puede cambiarles la vida. Lo digo por experiencia propia. No tienen por qué fumarlo, como digo, nunca he fumado esta sustancia sino que utilizo aceites o cremas.
– ¿Cuál debería ser el siguiente paso del Gobierno?
– Las leyes pueden enmendarse y mejorar. El siguiente paso debe ser permitir el autocultivo. Una o dos plantas por persona no son un problema. Lo que no se entiende es que las farmacéuticas puedan comprar plantaciones y los pacientes no podamos tener una planta en casa.
– ¿Cómo ha cambiado su calidad de vida desde que empezó a usar cannabis terapéutico?
–Mi enfermedad me provoca roturas de arterias cerebrales, migrañas brutales y pérdida de visión o equilibrio. Desde que uso cannabis, en seis horas puedo levantarme de la cama. Sigo algo mareado, pero ya no pierdo tres o cuatro días de vida. Mi calidad de vida ha mejorado radicalmente. No sé ni cómo cuantificarlo.
Enlace de origen : «El cannabis terapéutico me devolvió la vida; puedo levantarme de la cama»