«El alcalde nos deja utilizar el coche hasta para ir a orinar»

Abrimos la sección con varias llamadas al Teléfono del Lector de ciudadanos que se quejan del frío que hace en el Auditorio Municipal de Logroño. «¿Cómo es posible que se programen allí cosas sabiendo que no funciona la calefacción?», se pregunta uno de ellos. Y explica que «el otro día en el teatro y la semana pasada en el festival Cuéntalo la gente se quejaba de haberse quedado helada, e incluso una escritora se puso mala en el escenario. Y en verano lo mismo, pero al revés con el calor». Propone que se arregle esta situación o que no programen nada allí.

Con un trasfondo común se manifiesta el siguiente comunicante. «La vivienda digna es un derecho constitucional para el que la pueda pagar, pero en Logroño hay algunos constructores al estilo del Pocero de Seseña que venden pisos a precio de pastón, que te pasas media vida trabajando para pagarlos y una vez entregados aparecen defectos como mal aislamiento, humedad, fallos descomunales a la vista y ocultos y no se hacen cargo de reparar y tienes que acudir al juzgado», aborda sin titubeos. «El piso de tus sueños se convierte en una pesadilla. Una gran estafa, la desilusión y problemas para el comprador».

Una señora se queja de la tardanza en la entrega de una revista municipal. «Para cuando lo ves está para tirarlo a la basura y eso que vivo al lado del Ayuntamiento, ah, y otra cosa, –y coincide con la primera llamada– en el Auditorio hace un frío que pela».

El siguiente lector nos deja este mensaje: «¿Recuerdan el eslogan ‘si bebes no conduzcas’, pues bien podría extrapolarse a ‘si toses, tápate y no contagies a los demás’, a ver si ese mensaje va calando en la sociedad y nos vamos pareciendo más a Japón, donde se usan las mascarillas, en lugar de ir contagiando a viejos, aunque, claro, siempre hay quien piensa que hay que hacer todo lo contrario», ironiza.

Un fiel de la sección reclama «impuestos y tasas justos, pero gestionados de manera ejemplar evitando el abuso y la usura en nuestras plusvalías inmobiliarias». Y enumera: «Los coches, la ORA, el impuesto de circulación, las multas, el radar, los parkings privados… No se dan cuenta los conductores de que el alcalde nos deja utilizar el coche hasta para ir a orinar. Da igual si contamina, eso le da igual, es que es una fuente de ingresos. Un vecino paga hoy unos 700 euros/año y eso es una barbaridad. Un vecino pamplonés, aquí al lado, paga 435. Nada más, muchas gracias y buenos días». concluye.

Precisa María una foto que publicábamos recientemente sobre estas líneas en las que se recordaba la despedida del Gran Casino y apunta la lectora que «ojalá se hubiera puesto una foto de aquel Gran Casino que existía junto al Palacete con aquellos detalles arquitectónicos preciosísimos como su escalinata», recuerda.

Y concluimos con una queja sanitaria: «El día 6 pedí cita para el oftalmólogo y le dije que no me diera para el día siguiente. La sorpresa fue cuando me indicó que no era para el día siguiente, sino para el 7 de noviembre de 2025».

La remitente de esta fotografía nos lleva hasta el parque Juan Gispert de Logroño para denunciar que hay varias baldosas rotas. Según esta logroñesa, «ya son varios días los que he pasado por esta zona de paseo y me he encontrado con estas baldosas, que parece que están abandonadas a su suerte». Por ello, solicita, a quien corresponda, su retirada para evitar perjuicios mayores.

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