Enric Gardiner
Viernes, 6 de junio 2025, 18:12
Carlos Alcaraz luchará este domingo por revalidar el título de Roland Garros. El murciano, que puede levantar su quinto Grand Slam, el segundo sobre la arcilla parisina, doblegó a un lesionado Lorenzo Musetti (4-6, 7-6 (3), 6-0, 2-0 y retirada) y se enfrentará a Jannik Sinner o Novak Djokovic en la final de este domingo.
Alcaraz, que durante hora y media notó los nervios de estas semifinales, tuvo que picar piedra para imponerse a uno de los jugadores más en forma de esta gira de tierra batida. Musetti venía de alcanzar las semifinales en Madrid y Roma y la final de Montecarlo, por lo que era una auténtico peligro sobre esta superficie, como demostró durante el set y medio en el que puso en apuros al murciano.
Siendo justos con Alcaraz, debería haber aprovechado alguna de las oportunidades que tuvo en el primer parcial y que se le vinieron a la cabeza cuando, con 5-4 abajo, entregó el saque y con él el set. Comenzaba perdiendo por primera vez en este Roland Garros, pero daba la impresión de que al italiano no le iba a dar el físico para una cruenta batalla a cinco sets.
Cuando el español consiguió quebrar el servicio de su oponente y ponerse 2-0, era la señal de que el partido ya había cambiado y de que Musetti se apagaría poco a poco y Alcaraz saldría a la superficie. El juego del italiano, confiado en los efectos y la variedad, necesita un gran componente de músculo para permitirle llevar la iniciativa y llegar cómodo a golpeos, como el de su revés a una mano, muy complicados sin los apoyos necesarios.
Echó el resto para igualar el encuentro, recuperando dos roturas en ese segundo set, pero claudicó en el ‘tie break’, donde Alcaraz sí jugó bien los puntos calientes. La cara de Musetti hacia su banquillo era de derrota, como si hubiese comentado con ellos de antemano que o el partido acababa por la vía rápida o no habría posibilidad.
Problemas físicos
Y cuando llamó al fisio en el tercer set para apuntalar su muslo izquierdo, los temores se intensificaron. En cuanto Alcaraz amplió la ventaja, la movilidad de Musetti se resintió, como ya le pasó en la final de Montecarlo, y dejó de competir en condiciones. Intentó estirar la pelea, por deferencia hacia el público, pero con 2-0 en contra en el cuarto y a cuatro juegos de despedirse, se quitó la cinta del pelo, encaró la red y le dijo a Alcaraz que no podía más.
El murciano le dijo adiós con aplausos, como también la Philippe Chatrier, que entendió la dificultad de tener que retirarse a las puertas de una final de Grand Slam y le deseó la recuperación más temprana posible.
«No es lo ideal ganar un partido de esta manera. Lorenzo ha hecho una gira de tierra batida increíble. Es uno de los pocos que ha llegado al menos a semifinales en todos los grandes torneos de esta superficie. Es el quinto que lo logra en la historia. Le deseo lo mejor y que se recupere lo más pronto posible», aseveró el español en la entrevista a pie de pista junto a Lucas Pouille.
Tras su victoria, Alcaraz pudo sentarse tranquilamente a disfrutar de la segunda semifinal que disputarán este sábado Jannik Sinner y Novak Djokovic.
Enlace de origen : Alcaraz, a la final de Roland Garros