El PP critica ahora la solución «cara, en el mismo sitio y con retraso» para la subestación

El PP en el Ayuntamiento de Logroño criticó ayer que la solución que se está dando a la subestación eléctrica de Cascajos es «cara, la deja en el mismo sitio y, además, va con retraso». Una denuncia que sorprende cuando las obras para su sustitución ya están en marcha tras años de promesas incumplidas por parte de los populares con Cuca Gamarra como alcaldesa, lo que llevó al ‘tripartito’ de Gobierno a pedir al principal partido de la oposición «responsabilidad política y altura de miras».

«Este equipo de Gobierno es el único que ha avanzado y trabajado para resolver la subestación eléctrica de Cascajos», precisó el Ejecutivo local de PSOE, UP y PR+, «una vez que se siguen los pasos marcados y el 13 de septiembre comenzaron las obras de excavación para el soterramiento de la misma después del desmontaje que ha tenido lugar este verano».

«La realidad es que la subestación se queda en el mismo lugar en el que estaba, que se queda semienterrada ocupando una superficie de 430 metros cuadrados y con una altura máxima de hasta 3,70 metros», denunció ayer el portavoz popular, Conrado Escobar, junto a su concejal, Pablo Santaolalla, quienes reclamaron que se agilice su ejecución «puesto que tiene una influencia directa en la apertura de la nueva estación de autobuses».

El Gobierno local, al respecto, recordó que «se trata de un proyecto de soterramiento completo, el equipamiento queda por debajo del nivel de la calle, y solo serán visibles los edificios pequeños de acceso y las chimeneas», además de precisar que la futura estación «no depende para nada de ello».