
La jornada de este sábado quedará grabada para siempre en la memoria de Carmelo Loza. Debut en el campo profesional, en casa, ante su gente, … formando pareja con Altuna III y llegando a 22 en su primer partido con el frontón Barberito I de Baños de Río Tobía lleno hasta la bandera. Varias pancartas de ánimo y mucha gente en la grada con una camiseta blanca, especial para la ocasión, con la foto de Carmelo y una bandera de La Rioja en diagonal en la que se podía leer: «Orgullo de un pueblo. Aúpa Carmelo Loza. Zaguero de Honor».
La primera tarea de Carmelo Loza como profesional fue restar un saque de su rival y amigo Darío Gómez. Bien, pelota a la zona alta del frontón, alivio en el zaguero y muchos aplausos de la grada. «Al principio estaba nervioso, notaba las piernas agarrotadas pero el ánimo de la gente me ha ayudado mucho», reconocía el zaguero de Baños de Río Tobía al final del partido en los micrófonos de la televisión vasca.
Cualquier zaguero aficionado al que le dejen elegir pareja para su estreno como profesional, optaría por Jokin Altuna. El delantero de Amézqueta es un seguro de vida y ayer supo llevar a Carmelo Loza, calmándole, dejándole pelota franca cuando tocaba para que la llevara al rebote y estando siempre muy pendiente del bañejo.
La salida al partido de colorados fue fulgurante, como un fórmula uno en la clasificación. En un abrir y cerrar de ojos hicieron la mitad del trabajo (11-0) con un Jokin Altuna intratable. El 4-0 fue un pelotazo soberbio de Carmelo Loza que llegó hasta el rebote para delirio de la afición local. No se conformó el pelotari local con eso y volvió a obligar a Martija contra la pared del rebote en el 6-0.
No se había recompuesto la afición local del cañonazo de su paisano cuando Altuna III firmó un tanto de los que hay que enseñar a los niños y niñas que empiezan para que entiendan cómo utilizar el cuerpo cuando se juega a pelota. Atacó en el cuadro dos una esférica que llegaba floja de Martija, acomodando el cuerpo para entrar de zurda, agachándose para contactar con la pelota en el momento exacto y abrir al ancho para finalizar el tanto. Técnica aplicada al juego (7-0).
Montado en la ola ganadora, el delantero de Amézqueta engañó con el cuerpo a todo el frontón y durmió la pelota en el rincón con la mano izquierda. Milimétrico el tanto 9-0. Ovación cerrada para el delantero colorado.
Azules respiran un poco
Darío se sacudió el torbellino que tenía enfrente con un tanto de dos paredes que permitió a la pareja azul recuperar el saque y la iniciativa. Cambió el rumbo del partido y Darío y Martija comprimieron el marcador (11-9) para darle más emoción a esta tarde tan emotiva. Especialmente aplaudidos fueron los tantos 11-7 y 11-9, ambos de bella factura y muy similares, con el delantero pelaire firmando sendas carambolas con efecto que corrieron mucho por el suelo para desesperación de Altuna. Una jugada que Darío domina a la perfección.
Apareció Loza para terminar un tanto que había trabajado Altuna sacando de sitio a los azules (13-10) y los colorados lograron otra tacada importante (17-10). Esta serie de tantos incluyó un saque-remate de gancho inapelable de Altuna (16-10).
Dos errores de la pareja colorada –uno de Altuna III y otro de Carmelo Loza– además de un saque encajado por el zaguero local dejaron el marcador en 17-13.
De ahí hasta el final todos los tantos cayeron del mismo lado para terminar cerrando el partido 22-13 a favor de colorados. «Es un sueño cumplido. Ahora toca celebrar. Estoy muy contento con el partido, con el ambiente que se ha vivido y con el resultado», reconocía Carmelo Loza al final del encuentro.
Ayer, Baños de Río Tobía vivió el bautismo de fuego de otro pelotari profesional riojano después de que Titín lo hiciera en el mismo escenario en el año 1992.
Enlace de origen : El sueño cumplido de Carmelo Loza