
Santiago Abascal cumplió este domingo su amenaza y plantó al Rey, por primera vez desde que obtuvo el acta de diputado en 2019, en el … desfile del 12-O. El líder de Vox prefirió seguir la parada militar «desde la calle» y tampoco acudió a la posterior recepción que tradicionalmente organiza Zarzuela en el Palacio Real. Estaba invitado a ambos actos, pero su objetivo, como le hizo llegar por carta al propio monarca el sábado, era evitar «blanquear al Gobierno corrupto». Una maniobra con la que consiguió convertirse en uno de los protagonistas de la jornada al marcar perfil propio frente a Pedro Sánchez o a Alberto Núñez Feijóo, que sí estuvieron en la tribuna de autoridades. Especialmente en un momento en el que las encuestas recortan la distancia entre PP y Vox.
Abascal, pese a las críticas recibidas y las comparaciones inevitables con otros plantones protagonizados por formaciones de izquierda o secesionistas, confiaba por la mañana, cuando atendió a los medios, que Felipe VI no interpretará su ausencia como un feo a la Casa Real. «Pese a que hay muchos que quieren interpretarlo de esa manera», señaló. «No tengo ninguna duda de que el Rey no lo interpretará así. Nos hemos excusado ante él y hemos explicado que de ninguna manera podemos fingir normalidad en un momento en el que un gobierno, que es una mafia corrupta, está al frente del poder de España. Que no cuenten con nosotros para eso», zanjó.
Abascal dijo estar «tranquilo» con la decisión tomada y convencido de que han hecho «lo correcto». También avanzó que esta postura de no compartir espacio con el Gobierno se mantendrá en el tiempo, salvo, claro, en «foros parlamentarios», como el Congreso.
Lo cierto es que dentro de Palacio, su nombre sonó en muchos de los corrillos que se formaron tras el besamanos a la familia Real. Feijóo fue uno de los que se sumó al coro de críticas y afeó al líder de Vox haber plantado al monarca al definir su ausencia como «propia de partidos como Bildu». El líder del PP incidió en que la alternancia es «imprescindible» frente al Gobierno de Sánchez.
Pero el presidente de los populares ya plantó, a su vez, a Felipe VI cuando se ausentó a principios de septiembre del acto solemne de apertura del año judicial. En aquella ocasión lo justificó con el argumento de que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, procesado por un presunto delito de revelación de secretos, «es un presunto delincuente», y que el líder de la oposición «no tiene ninguna obligación constitucional» de asistir a ese acto.
Lo mismo ocurrió en junio, cuando Feijóo no acudió a la conmemoración en el Palacio Real del 40° aniversario de la firma del tratado de adhesión de España a la Comunidad Europea.Explicó que no quería coincidir con Sánchez el mismo día que se conoció el informe de la UCO en el que la Guardia Civil implicaba al entonces numero dos del PSOE, Santos Cerdán, en el ‘caso Koldo’.
Mayoría en peligro
La tensión entre PPy Vox es cada vez mayor mientras las encuestas de intención de voto elevan a Vox –estos lo achacan a un «inflamiento» de su posición para «beneficiar» relato del Gobierno–. El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, reconoció este domingo en una conversación informal con periodistas durante la recepción en el Palacio Real, que su rival en los comicios autonómicos previstos para el año que viene no será el PSOE andaluz liderado por María Jesús Montero, a la que ve «amortizada», sino Vox, del que alerta«empiezan a ser transversales».De hecho, llegó a confesar que, por primera vez en mucho tiempo, ve peligrar la mayoría absoluta que obtuvo en los últimos comicios.
Moreno no achaca este temor, en cambio, a la reciente crisis por los cribados del cáncer de mama. Reconoce que su partido encargó una encuesta ‘flash’ la semana pasada para testar la respuesta del electorado y, aunque reduce su ventaja, les otorga 55 escaños, la frontera que marca la mayoría absoluta en Andalucía.
Enlace de origen : Abascal planta al Rey para marcar perfil frente a PP y PSOE