La «paciencia» que ahora pide Yolanda Díaz con la negociación sobre la reducción de la semana laboral a 37,5 horas no ha calado entre … los sindicatos. La vicepresidenta decidió el martes dar marcha atrás y retrasar hasta después del verano la tramitación de la propuesta –cuyo debate a la totalidad está pendiente– ante el temor de que Junts y el PP tumbaran su iniciativa estrella en el pleno extraordinario que se celebra la semana que viene en el Congreso. Ante ese panorama, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, advirtió este miércoles que habrá movilizaciones en otoño para presionar a las formaciones que están en contra de esta propuesta, un calendario que comparte con CCOO.
Los sindicatos mayoritarios, de hecho, tenían previsto convocar una concentración frente al Congreso de los Diputados el próximo martes, para hacerlo coincidir con el debate que iba a tener lugar, inicialmente, en el hemiciclo. Sin embargo, tras la decisión de la vicepresidenta segunda, está acción se sustituirá por una asamblea, como ha confirmado el propio Álvarez en la cadena Ser.
De hecho este miércoles en Cataluña ya se vivieron las primeras protestas en contra de esta decisión por parte de UGTyCCOO, que califican el retraso como «fracaso». En una concentración celebrada frente a la sede Foment del Treball –organización patronal cercana a Junts–, en Barcelona que congregado a 2.500 personas exigieron al partido que lidera Carles Puigdemont que decida de qué lado quiere estar, si de la «mayoría social catalana» o de los «lobbies».
Oportunidad «perdida»
Para el líder de UGT este retraso no es baladí, como sí deslizaron el miércoles desde el ministerio de Trabajo. «Por supuesto que pasa mucho. Este es un proyecto de ley que ya lleva casi un año. Cada día que pasa es una oportunidad que perdemos», explicó, antes de advertir de que la «incertidumbre política «podría hacer descarrilar» la medida.
Los sindicatos también advierten ya de que la reducción de la jornada laboral «va a ser una de las cuestiones fundamentales en las organizaciones sindicales» en los próximos meses.
Díaz, por su parte, justificó este miércoles la decisión de posponer la rebaja de la jornada laboral hasta el próximo periodo de sesiones porque ahora, insistió, no se producían «circunstancias serenas». La ministra de Trabajo ha asegurado que están trabajando con la formación catalana en medidas de acompañamiento para las pequeñas y medianas empresas, que se pusieron encima de la mesa durante la negociación con la patronal y los agentes sociales, pero que finalmente no formaron parte del acuerdo entre el Gobierno y CC OO y UGT porque CEOE y Cepyme no se sumaron.
Por su parte, PNVy PSE coincidieron este miércoles en señalar a la vicepresidenta segunda y a los principales sindicatos nacionales como responsable de que el País Vasco no avance hacia la transferencia plena de la gestión de la Seguridad Social tras la reunión que el martes mantuvieron el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el lehendakari, Imanol Pradales.
Enlace de origen : Los sindicatos preparan un otoño de movilizaciones si no se acelera la reducción de la jornada laboral