Las ventajas de las calderas de biomasa
Otra forma muy efectiva de reducir las emisiones de CO2 es la utilización de calderas de biomasa. Equipamientos que ofrecen varias ventajas significativas en comparación con las calderas convencionales que funcionan con combustibles fósiles como el gas natural, el petróleo o el carbón.
En primer lugar, la biomasa es una fuente de energía renovable, lo que significa que su suministro es más sostenible a largo plazo. La combustión de biomasa, además, tiende a producir menos contaminantes atmosféricos nocivos, lo que contribuye a una mejor calidad del aire y a una menor contaminación local.
Otra ventaja clave es que el uso de biomasa como combustible a menudo implica el aprovechamiento de recursos locales, lo que puede beneficiar a las economías de la zona y reducir la dependencia de combustibles importados.
La flexibilidad de combustible de las calderas de biomasa también es una ventaja, ya que estas pueden funcionar con diversos materiales orgánicos como cáscaras, huesos, frutos, ramas, así como con residuos industriales como el serrín, lo que proporciona diferentes opciones según la disponibilidad local y las preferencias del usuario.
Por último, el uso de biomasa como combustible puede ayudar a reducir la acumulación de residuos orgánicos al aprovecharlos como recurso energético, lo que contribuye a prácticas más sostenibles de gestión de residuos.
Debido a todos estos factores, el consumo de biomasa en nuestro país no para de crecer. Según datos del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), en 2022 el consumo de biomasa en España alcanzó los 48,1 millones de MWh. Esta cifra representa un aumento del 6,7% respecto al año anterior.
Enlace de origen : Alojamientos de lujo que te harán sentir parte de la naturaleza